Esta es otra nota que extraigo del diario de John Stuart Mill.
25 de enero de 1854
La vanidad, en algunas personas, parece ser un defecto intelectual, una incapacidad para apreciar cualidades diferentes de las que ellas mismas poseen; incapacidad para sentir la pequeñez de todos los asuntos y talentos humanos; ignorancia de la multitud de personas que han sido o que son superiores a ellas, y de la multitud de logros superiores a lo poquito que ellas han conseguido. En conformidad con esto, esta clase de personas vanidosas exageran los méritos y los talentos de sus amigos o de toda otra presona que les gusta o que admiran. En otros, la vanidad parece un defecto moral, una forma de egoísmo, un detenerse en su propio yo y preocuparse más de lo justo por él y por lo que a él pertenece, especialmente lo que les lleva a darse importancia.
Referencia: J.S. Mill Diario Alianza Editorial, S.A. Madrid, 1996 ISBN: 84-206-4696-2
25 de enero de 1854
La vanidad, en algunas personas, parece ser un defecto intelectual, una incapacidad para apreciar cualidades diferentes de las que ellas mismas poseen; incapacidad para sentir la pequeñez de todos los asuntos y talentos humanos; ignorancia de la multitud de personas que han sido o que son superiores a ellas, y de la multitud de logros superiores a lo poquito que ellas han conseguido. En conformidad con esto, esta clase de personas vanidosas exageran los méritos y los talentos de sus amigos o de toda otra presona que les gusta o que admiran. En otros, la vanidad parece un defecto moral, una forma de egoísmo, un detenerse en su propio yo y preocuparse más de lo justo por él y por lo que a él pertenece, especialmente lo que les lleva a darse importancia.
Referencia: J.S. Mill Diario Alianza Editorial, S.A. Madrid, 1996 ISBN: 84-206-4696-2
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